Bienvenido a Psicología católica. Un espacio para compartir experiencias, acompañamiento terapéutico, emocional y espiritual. Nada es casualidad, si has llegado hasta aquí es por algo.
En este espacio encontrarás reflexiones en torno al desarrollo humano y la espiritualidad. Soy psicóloga católica, te puedes poner en contacto al correo psicologiacatolica@hotmail.com
Si buscas un psicólogo católico me encuentras en la Ciudad de México en la Colonia García Ruiz, Santa Fe (a 5 min. del metro Observatorio). Contamos con otra sede en la Colonia del Valle.
miércoles, 30 de septiembre de 2015
TOMANDO CONCIENCIA DE NUESTRAS EMOCIONES
TOMANDO CONCIENCIA DE NUESTRAS EMOCIONES
Muchas veces escuchamos en la radio programas
de autoayuda de tipo “casero” que, si bien nos ayudan a experimentar un
sentimiento de seguridad, por otro lado nos dejan un sinsabor emocional, pues
toda terapia requiere seguimiento.
Mi objetivo en esta sección es poner de
manifiesto que, una vez que nos hacemos un plan de vida con los elementos que
están a nuestro alcance, seremos capaces de procurarnos autoayuda de calidad.
Lo primero, para toda terapia o “autoterapia”
es tomar conciencia de nuestras emociones. Trabajo arduo para quienes hemos
sido formados con una conciencia impersonal. Es decir, para quienes la
formación ha sido basada en cuestiones moralistas o anti-éticas, modelo de
generaciones donde lo imprescindible era dar respuesta a conductas sociales
manifiestas.
Tomar conciencia de sí mismos implica responsabilidad
en nuestros actos, observación de conductas y planeación estratégica de nuevos
modelos basados en la convicción particular de valores, emociones y sentimientos,
que reflejen una particular forma de ser y de sentirnos en “sintonía” con lo
que nos rodea.
Una buena terapia nos servirá para la
solución a conflictos que tienen que ver con conductas asociadas a eventos del
pasado, como la muerte de un ser querido, la pérdida del empleo, la ruptura de
una relación amistosa o amorosa; y nos reafirmará como personas aumentando
nuestra capacidad de reflexión y de diálogo.
El resultado de esto será la aceptación de
situaciones que no podemos cambiar y evitar en la medida de lo sucesivo
conductas que nos perjudican, y de las que muchas veces no somos concientes.
Por ende una buena terapia nos llevará a elevar nuestro estado de conciencia y
procurará una mejor calidad de vida.
Pero, ¿por dónde comenzar? ¿cómo darme cuenta
de estas conductas que me llevan en ocasiones al “auto rechazo? ¿cómo
diferenciar una conducta aprendida de una opción de vida?
Para ello, quiero compartirles una breve
reflexión, extractada del libro “Cerrando ciclos vitales” de Stecca de Alvizúa:
Nuestra historia personal es como un libro que puede ser interpretado
de muchas maneras.
La historia realmente no existe, sino que la inventa el hombre a
medida que va siendo protagonista del tiempo.
Alguna veces evitamos recordar algunos pasajes
de nuestra vida o aspectos de nuestra personalidad generando con ellos
situaciones insospechadas que van marcando pautas para nuestra identidad
personal.
Una vez que adquirimos el hábito de evitar el
contacto con lo que percibimos como desagradable, vergonzoso o doloroso,
seguiremos haciéndolo con la gente y otros elementos de la vida, y nos quedará
un camino muy estrecho.
Generalmente el hombre tiende a desplazar de
su vida situaciones que no le han sido agradables, y no se da cuenta de todo el
“material” que desecha en ese afán por evitar el sufrimiento. Hemos de tener
claro que nuestra historia está llena de hechos, eventos y personajes que no
pueden ser cambiados, pero sí interpretados de forma constructiva, sana y
responsable.
Cada vez que yo niego una realidad en mi vida
por miedo o temor al daño que pueda hacerme, inconcientemente me niego a mi
mismo la oportunidad de crecimiento personal.
Gerardo (llamaré así a este paciente) es un
chico emprendedor, serio, responsable, que ha mudado de país con la finalidad
de encontrar mejores oportunidades de crecimiento y económicas. Pero ha tenido
serias dificultades debido a su necesidad de encontrar un sentido a su vida. Ha
probado en muchas corrientes humanistas y transpersonales tratando de llenar ese
vacío de su esencia. Es una persona religiosa, entregada al trabajo y
simpática, pero no logra encontrar ese sentido a su vida que dejó olvidado en
algún lugar de su camino.
Al acudir a terapia me relata algunos hechos
de su vida, siente que ha ido tras cuestiones efímeras que, lejos de ayudarle a
encontrar pistas para su crecimiento, han menguado el deseo de realización
personal.
Hacemos un ejercicio que consistía en
imaginarse parado frente a una plaza rodeada de gente, paisajes, una fuente,
jardines y algunas situaciones concretas. Le pido que imagine que durante mucho
tiempo se ve dando vueltas alrededor de esa plaza en su búsqueda de
autoconocimiento, de ese infinito al que pretende encontrar (recordemos que es
una persona religiosa).
Le pido entonces que me diga cómo se siente,
y lo que percibe en esa búsqueda. Atónito me responde que no puede ver nada en
absoluto porque, en esa necesidad de ir tras su “esencia”, que ahora ni el
mismo puede explicar, olvida ver el panorama, y no se imagina la fuente, ni los
jardines, ni los paisajes, ni a la gente y mucho menos a esas personas haciendo
actividades. Cae en cuenta que durante mucho tiempo ha ido dando vueltas sin
saber si en realidad ya encontró eso que tanto andaba buscando.
Le pido ahora que se relaje, que respire, y
que tome un descanso sentado en la fuente. Que trate de mirar el paisaje y que
me describa todo aquello que, sentado en la fuente, es capaz de ver.
Conforme va relatando su historia, siente un
vacío inmenso debido a que durante mucho tiempo dio vueltas en balde sin
percatarse que todo lo que necesita para llenar sus vacíos está delante de sí,
aún más, está dentro de sí, y que lo único que necesita es dejar de buscar
fuera de él mismo respuestas a sus interrogantes. “Todo está en mi interior”
repitió un par de veces alegremente y con un dejo de admiración.
¿Cuántas veces nos encontramos en la
situación de Gerardo, dando vueltas en un sitio, buscando “algo” con que llenar
nuestros vacíos, y olvidamos mirar lo que hay a nuestro alrededor, porque nos
acostumbramos a tenerlo ahí? El hombre, en esa sed de buscar su esencia,
comienza un recorrido interminable, escudriñando en la vorágine del mundo
escenarios efímeros que distan de generar el sentido de pertenencia, como lo
indicaba Fromm en su libro “El arte de amar”:
La conciencia de sí mismo lleva al hombre a
un proceso de separatidad, donde busca
pertenecer a algo, a alguien. La separatidad
en sí misma es una fuente de intensa angustia
Entendiendo este proceso podemos decir que el
hombre experimenta esa necesidad de encontrar su esencia, y esa búsqueda se
topa con sus miedos, manifestados en la mayoría de los casos como “soledad”, y
ésta como angustia, debido a que su fin último es encontrar ese sentido de
pertenencia, y es entonces cuando sale de sí mismo en un intento fallido y
desesperado de encontrar su pertenencia al absoluto. Entiéndase absoluto como
su propia esencia, sin necesariamente mostrar connotación religiosa, ética o
moral.
Tomar
conciencia de nuestras emociones significa entonces detenernos en el camino
para reflexionar, introspeccionar, observar todo lo que fluye en nuestro
interior y detectar las zonas que están dañadas debido a conductas del pasado.
A veces nos cuesta trabajo echar una mirada
al pasado debido a lo doloroso que ha sido el mismo, pero nosotros iremos
trabajándolo, de forma que lo miremos, pero no nos detengamos en él, sino que
busquemos las herramientas necesarias para vivir el presente “capitalizando” lo
que nos sirva y desechando lo que ya esté desfasado para construir nuevas
relaciones interpersonales y con nosotros mismos.
- Detectar
nuestras “zonas erróneas”
Dyer, en su libro “tus zonas erróneas” habla
de la forma en la que nosotros construimos relaciones, en base a la percepción
que tenemos de nosotros mismos y de lo que nos rodea.
Está por demás decir que cada uno tiene una
forma de percibir la realidad de forma distinta. Cada persona es un cúmulo de
emociones y sentimientos único e irrepetible. Por ende, jamás podremos pensar
como los demás, si bien podemos entender su proceso de acuerdo a vivencias
personales.
Cuando existen situaciones en nuestra vida
que generan inconformidad o vanas expectativas (pretender ganar excesivo dinero
cuando nuestro contexto es de desempleo; encontrar al hombre o a la mujer
“ideal” sin mirar nuestra realidad, etc.), surgen un sinfín de emociones que
nos hacen caer una y otra vez en una fosa que cada día se va haciendo más
honda. Con ello caemos en crisis depresivas ligeras que con el tiempo van en
aumento, situaciones que se repiten una y otra vez porque atacamos el tallo que
las genera y no la raíz.
Cuando el ser humano es capaz de realizar la
introspección de su vida, se da cuenta que hay situaciones que se repiten una y
otra vez y que solo con un trabajo personal pueden ser eliminados o menguados.
Estamos tan ocupados pensando en los demás y en quedar bien, o en nuestros
problemas que rara vez nos detenemos a pensar en nosotros, nos dedicamos muy poco tiempo y la mayoría de la gente no se conoce a sí misma.
a) No sabe lo que le gusta
b) No sabe hacerse feliz a sí misma y espera que otros le hagan feliz
c) Se ignora y no se dedica tiempo, espera que otros le dediquen tiempo y le
hagan caso.
Para tener una vida mas feliz es de suma importancia que te conozcas a ti mismo, pregúntate:
¿Cual es mi comida favorita?
¿Que música me transporta y me relaja o me hace feliz?
¿Que puedo hacer en este día para acercarme a mis objetivos (puede ser cualquier cosa pequeña)?
¿Que necesito darme a mi mismo para sentirme mas satisfecho?
Una vez que te hayas cuestionado sobre tus gustos, ahora ya sabes mas sobre ti, ya te has demostrado un poco de amor y atención, y con ello has encontrado herramientas para conocerte y saber qué zonas de tu personalidad están fuera de lugar.
Romance de la gotita de agua
Romance de la
gotita de agua
Fuente: Catholic.net
Autor: Llucià Pou Sabaté
Transcribo un poema escrito por una carmelita descalza de Igualada (Cataluña, España), que ha llenado de consuelo a más de una persona enferma, y que puede servirnos a todos, pues describe la trayectoria de la vida, con momentos de luces y de sombras, pero que al final todo encuentra un sentido en los planes de Dios. Me limitaré a algunos comentarios, en cursiva. En la primera parte, habla de sueños y de infancia, de imaginación y de ganas de vivir, sin codicia que la distraiga del deseo de cumplir la voluntad de Dios, que va naciendo en su alma y que cultivará día a día, pues la vida cristiana puede resumirse en docilidad en dejarse llevar por el Espíritu de Dios:
Fuente: Catholic.net
Autor: Llucià Pou Sabaté
Transcribo un poema escrito por una carmelita descalza de Igualada (Cataluña, España), que ha llenado de consuelo a más de una persona enferma, y que puede servirnos a todos, pues describe la trayectoria de la vida, con momentos de luces y de sombras, pero que al final todo encuentra un sentido en los planes de Dios. Me limitaré a algunos comentarios, en cursiva. En la primera parte, habla de sueños y de infancia, de imaginación y de ganas de vivir, sin codicia que la distraiga del deseo de cumplir la voluntad de Dios, que va naciendo en su alma y que cultivará día a día, pues la vida cristiana puede resumirse en docilidad en dejarse llevar por el Espíritu de Dios:
“Pues,
he aquí que una vez, / una gotita de agua / en lo profundo del mar / vivía con
sus hermanas.
Era feliz la gotita… / libre y rápida bogaba / por los espacios inmensos / del mar de tranquilas aguas / trenzando rayos de sol / con blondas de espuma blanca.
¡Qué contenta se sentía, / pobre gotita de agua, / de ser humilde y pequeña, / de vivir allí olvidada / sin que nadie lo supiera, / sin que nadie lo notara!
Era feliz la gotita… / ni envidiosa ni envidiada, / sólo un deseo tenía, / sólo un anhelo expresaba…
En la calma de la noche / y al despertar la alborada / con su voz hecha murmullo / el Buen Dios así rezaba: / “Señor, que se cumpla en mí / siempre tu voluntad santa; / yo quiero lo que Tú quieras, / haz de mi cuanto te plazca”… / y escuchando esta oración, / Dios sonreía… y callaba.
Una tarde veraniega / durmióse la mar, cansada, / soñando que era un espejo / de fina y de bruñida / un sol de fuego lanzaba / sus besos más ardorosos.
Era feliz la gotita / al sentirse así besada… / el sol, con tiernas caricias, / la atraía y elevaba / hacia él y, en un momento, / transformóla en nube blanda.
Se reía la gotita / al ver cuan alto volaba, / y, dichosa, repetía / su oración acostumbrada: / “Cúmplase, Señor, en mí / Siempre tu voluntad santa”… / al escucharla el Señor / se sonreía… y callaba.
Era feliz la gotita… / libre y rápida bogaba / por los espacios inmensos / del mar de tranquilas aguas / trenzando rayos de sol / con blondas de espuma blanca.
¡Qué contenta se sentía, / pobre gotita de agua, / de ser humilde y pequeña, / de vivir allí olvidada / sin que nadie lo supiera, / sin que nadie lo notara!
Era feliz la gotita… / ni envidiosa ni envidiada, / sólo un deseo tenía, / sólo un anhelo expresaba…
En la calma de la noche / y al despertar la alborada / con su voz hecha murmullo / el Buen Dios así rezaba: / “Señor, que se cumpla en mí / siempre tu voluntad santa; / yo quiero lo que Tú quieras, / haz de mi cuanto te plazca”… / y escuchando esta oración, / Dios sonreía… y callaba.
Una tarde veraniega / durmióse la mar, cansada, / soñando que era un espejo / de fina y de bruñida / un sol de fuego lanzaba / sus besos más ardorosos.
Era feliz la gotita / al sentirse así besada… / el sol, con tiernas caricias, / la atraía y elevaba / hacia él y, en un momento, / transformóla en nube blanda.
Se reía la gotita / al ver cuan alto volaba, / y, dichosa, repetía / su oración acostumbrada: / “Cúmplase, Señor, en mí / Siempre tu voluntad santa”… / al escucharla el Señor / se sonreía… y callaba.
(Son momentos de subir, de goce, de sentir entusiasmada que todo se ve de color rosa, que todos los sueños ser harán realidad)
Mas,
llegado el crudo invierno / la humilde gota de agua, / estremecida de frío, /
notó que se congelaba / y, dejando de ser nube, / fue copo de nieve blanca.
Era feliz la gotita / cuando, volando, tornaba / a la tierra, revestida / de túnica inmaculada / y en lo más alto de un monte / posaba su leve planta.
Al verse tan pura y bella / llena de gozo rezaba: / “Señor, que se cumpla en mí / Siempre tu voluntad santa”… / y allá, en lo alto del cielo / Dios sonreía… y callaba…
Era feliz la gotita / cuando, volando, tornaba / a la tierra, revestida / de túnica inmaculada / y en lo más alto de un monte / posaba su leve planta.
Al verse tan pura y bella / llena de gozo rezaba: / “Señor, que se cumpla en mí / Siempre tu voluntad santa”… / y allá, en lo alto del cielo / Dios sonreía… y callaba…
(Aquí veo referencias a la vocación al Carmelo –monte- vestida ya del hábito -túnica inmaculada-. Una vez vencido el afán de independencia, la entrega a Dios da un gozo de auténtica libertad. Sin embargo, la vocación de cada uno es la importante, lo que quiere Dios es que cumplamos su voluntad, manifestada en primer lugar en los mandamientos, pero –como siguió diciendo Jesús al joven rico- seguirle en las circunstancias en las que nos llama, y decirle que sí. Por tanto no se trata de un “estado de perfección” al que nos subimos y ya está hecho, sino de la “perfección en el propio estado”, ahí dejarse llevar por lo que Dios quiere, en docilidad manifestada en las cosas de cada día, como sigue diciendo la poesía...)
Y
llegó la primavera / de mil galas ataviada; / al beso dulce del sol / fundióse
la nieve blanca / que, en arroyo convertida, / saltando alegre cantaba / al descender
de la altura / cual hilo de fina plata.
Era feliz la gotita… / ¡cuánto reía y gozaba / cruzando prados y bosques / en su acelerada marcha! / y a su Dios esta oración / suavemente murmuraba: / “En el cielo y en el mar, / en el prado o la montaña, / sólo deseo, Señor, / cumplir tu voluntad santa”… / y Dios, al verla tan fiel, / se sonreía…y callaba…
Era feliz la gotita… / ¡cuánto reía y gozaba / cruzando prados y bosques / en su acelerada marcha! / y a su Dios esta oración / suavemente murmuraba: / “En el cielo y en el mar, / en el prado o la montaña, / sólo deseo, Señor, / cumplir tu voluntad santa”… / y Dios, al verla tan fiel, / se sonreía…y callaba…
(No es difícil esta oración, cuando todo va según el entusiasmo de esta segunda juventud, en el entusiasmo que da el seguimiento del Amor auténtico... pero llega la cruz, y ahí se demuestra que la santidad no es sólo decir “Señor, Señor” sino cumplir su Voluntad...)
Pero
un día la gotita / contempló, aterrorizada, / la oscura boca de un túnel / que
engullirla amenazaba, / trató de huir, mas en vano, / allí quedó encarcelada /
en tenebrosa mazmorra / musitando en su desgracia / aquella misma oración / que
antes, dichosa, rezaba: / “Señor, que se cumpla en mí / siempre tu voluntad
santa… / en esta noche tan negra, / en esta noche tan larga / en que me encuentro
perdida / Tú sabes lo que me aguarda, / yo quiero lo Tú quieras, / haz de mí
cuanto te plazca”… / mirándola complacido / Dios sonreía… y callaba…
(En esos momentos de oscuridad, cuando llega la noche, el sufrimiento, la cruz que no esperábamos, la perseverancia junto al Señor, con paciencia, da paz. Y, cuando más negra es la noche, amanece Dios: no hay pena que mil años dure, ni Dios nos prueba por encima de nuestras fuerzas, sino que cuando nos manda una prueba también nos da la gracia para llevarla...)
Pasaron
día y noches / y pasaron las semanas, / pasaron, lentos, los meses / y la gota,
aprisionada / en aquel túnel tan triste / iba avanzado en su marcha / y… fue
feliz la gotita, / porque cuando a Dios oraba, / sentía una paz muy honda / y de
sí misma olvidada, / vivía para cumplir / de Dios la voluntad santa.
Mas, he aquí que, de pronto, / quedó como deslumbrada, / había vuelto a la luz / y se encontró colocada / en una linda jarrita / que una monjita descalza / depositó con amor / sobre el ara consagrada.
Presa de dulce emoción / la pobre gota temblaba / diciendo : “Yo no soy digna / de vivir en esta casa, / que es la casa de mi Dios / y de sus esposas castas”. / El Señor que la vio humilde / Sonreía… y se acercaba.
Mas, he aquí que, de pronto, / quedó como deslumbrada, / había vuelto a la luz / y se encontró colocada / en una linda jarrita / que una monjita descalza / depositó con amor / sobre el ara consagrada.
Presa de dulce emoción / la pobre gota temblaba / diciendo : “Yo no soy digna / de vivir en esta casa, / que es la casa de mi Dios / y de sus esposas castas”. / El Señor que la vio humilde / Sonreía… y se acercaba.
(En esta parte final, vemos nuestra participación en el sacrificio de la Cruz de Jesús, cuando ponemos todo en la ofrenda y nuestra vida se convierte en sacri-ficio: de “sacra”, sagrado; y “facio”, hacer: hacer sagradas las cosas, introducirlas en Dios, que como decía san Josemaría Escrivá, no hacemos sólo lo que el mito del rey Midas que transformaba todo lo que tocaba en oro, sino que transformamos todo en gloria.)
Empezó
la Eucaristía, / la gotita que, admiraba, / los ritos iba siguiendo, / sintió
que la trasladaban / desde la bella jarrita / hasta la copa dorada / del cáliz
de salvación / y, con el vino mezclada, / en puro arrobo de amor / repetía su
plegaria: / “Señor que se cumpla en mí / siempre tu voluntad santa”… / y
sonreía el Señor, / sonreía… y se acercaba…
Llegado ya el gran momento, / resonaron las palabras / más sublimes que en la tierra / pudieron ser pronunciadas, / y el altar se hizo Belén / en el Vino y la Hostia santa. / Y…¿qué fue de la gotita ?... / ¡Feliz gotita de agua!... / Sintió el abrazo divino / que hacia Sí la arrebataba / mientras, por última vez / mansamente suspiraba: / “Señor, que se cumpla en mí / siempre tu voluntad santa”… / y, al escucharla su Dios / sonreía…y la besaba / con un beso tan ardiente / que el “Todo” absorbió a la “nada” / y en la sangre de Jesús / la dejó transubstanciada…
Esta es la pequeña historia / de una gotita de agua / que quiso siempre cumplir / de Dios la voluntad santa.
Llegado ya el gran momento, / resonaron las palabras / más sublimes que en la tierra / pudieron ser pronunciadas, / y el altar se hizo Belén / en el Vino y la Hostia santa. / Y…¿qué fue de la gotita ?... / ¡Feliz gotita de agua!... / Sintió el abrazo divino / que hacia Sí la arrebataba / mientras, por última vez / mansamente suspiraba: / “Señor, que se cumpla en mí / siempre tu voluntad santa”… / y, al escucharla su Dios / sonreía…y la besaba / con un beso tan ardiente / que el “Todo” absorbió a la “nada” / y en la sangre de Jesús / la dejó transubstanciada…
Esta es la pequeña historia / de una gotita de agua / que quiso siempre cumplir / de Dios la voluntad santa.
(Cuando nos unimos al sacrificio de Jesús y hacemos del día una Misa... es el “Todo” que nos asume y nos perdemos en Él, nos hacemos Cristo, para la Vida de todos...)
martes, 31 de marzo de 2015
Papa Francisco al Camino Neocatecumenal: ¡Cuánta necesidad tiene el hombre de hoy de sentir que Dios lo ama!
VATICANO, 06 Mar. 15 / 09:39 am (ACI).- El Papa Francisco recibió este viernes a miles de fieles del Camino Neocatecumenal, incluyendo a 200 familias de este movimiento que irán en misión a diversos países del mundo. En su discurso, el Santo Padre les recordó la urgencia de anunciar el Evangelio y les recordó que las personas en la actualidad necesitan saber que Dios las ama y que el amor es realmente posible.
A continuación y gracias a Radio Vaticano, el texto completo de las palabras del Santo Padre:
Queridos hermanos y hermanas, buenos días a todos, y gracias, muchas gracias
Guía de oración para visitar las 7 iglesias en la noche entre el Jueves y el Viernes Santo
REDACCIÓN CENTRAL, 31 Mar. 15 / 04:05 pm (ACI).- De la noche del Jueves Santo hasta el Viernes Santo en la mañana es devoción bíblica y católica el visitar las siete iglesias. Por ello te compartimos una guía de oración que te puede ser útil mientras se realiza este recorrido en familia, grupo, comunidad o de manera personal.
Esta tradición nació en Roma y se ha propagado por el mundo entero. Su iniciador fue San Felipe Neri.
La finalidad de estas visitas es agradecer a Jesucristo el don de la Eucaristía y del Sacerdocio que instituyó aquella noche santa y acompañarle en la soledad y sufrimientos en el Huerto de Getsemaní, así como en las afrentas recibidas en las casas de Anás, Caifás, Herodes, Pilato, en el Calvario y en el silencio del sepulcro.
Ante el Monumento, donde se reserva al Señor Sacramentado, se le da gracias a Jesús por su Sagrada Pasión con la que redimió con amor al mundo. De igual manera se le ofrece disculpas por el abandono con que frecuentemente se le deja en el Sagrario y quizás por la poca frecuencia a la Santa Misa y Comunión.
Meditaciones y oraciones
Primera Iglesia: Jesús en el huerto
Medita: Serían como las 10 de la noche al llegar Jesús al Huerto de Getsemaní. Su alma se llenó de tristeza, entró en agonía ante la visión de los sufrimientos que se le venían encima y la ingratitud de la humanidad. Oró por espacio de tres horas con lágrimas y sudor de sangre, que en gotas cayó en tierra. Aquí llegó Judas y con un beso lo entregó a quienes vinieron a aprenderle, aunque más bien fue su Amor a ti el que le entregó.
Oración: Te compadecemos Jesús, y te damos gracias por lo que sufriste por nuestra Salvación en la Oración del Huerto. Nos duele la traición y alevosía con que fuiste hecho preso. Concédenos fortaleza en nuestros sufrimientos y danos el don de la oración.
Se rezan 3 Padrenuestros.
Segunda Iglesia: Jesús en casa de Anás
Medita: Jesús, maniatado como un vulgar malhechor, interrogado por Anás sobre sus discípulos y doctrina, responde con entereza y mansedumbre que pregunte a quienes le han escuchado y que saben bien lo que Él ha dicho y enseñado. Un guardián le dio una bofetada que de seguro lo hizo tambalearse.
Oración: Jesús, te compadecemos; te damos gracias por la injusta humillación que sufriste al ser abofeteado. Te pedimos que nos ayudes a hablar con verdad, serenidad y educación y a respetar a nuestros interlocutores.
Se rezan 3 Padrenuestros.
Tercera Iglesia: En casa de Caifás
Medita: Aquí Jesús tiene que oír cómo se tergiversan sus doctrinas. Cómo se aducen falsos testimonios en su contra. Cómo se le reta a proclamar que es Hijo de Dios, pero sin intención de reconocerle. Cómo Pedro niega conocerle. Cómo se le declara reo de muerte.
Oración: Jesús, tú eres la verdad y se amontonan mentiras para callarte. Has dicho: la verdad los hará libres y tienes que ver cómo la mentira nos esclaviza. Has dicho: ustedes son mis amigos y con qué facilidad te negamos. En ti somos hijos de Dios y qué pobreza la de nuestra vida. Te compadecemos, Jesús, por esas traiciones y te pedimos la gracia de ser tus testigos valientes, fieles a tu amor.
Se rezan 3 Padrenuestros.
Cuarta Iglesia: En casa de Pilato
Medita: Jesús es acusado ante Pilato de malhechor, alborotador del pueblo, que prohíbe pagar el tributo al César y que se proclama rey. Pero Él también anuncia que todo el que es de la verdad escucha su voz. Lo que piden es que sea condenado a muerte.
Oración: Jesús, te proclamamos Cristo Rey, porque eres el único Rey de la Verdad, de la Vida y del Amor. Te compadecemos por la tristeza que tiene que darte el descaro con que te calumnian y por la ceguera con que juegan con las palabras salidas de tu boca. Te pedimos que limpies estos labios y estos corazones con los que te recibimos, y que nuestras vidas den testimonio de Ti.
Se rezan 3 Padrenuestros.
Quinta Iglesia: En casa de Herodes
Medita: Herodes, curioso, pero sin compromiso, se alegra de ver a Jesús. Espera divertirse viéndole hacer algún milagro. Jesús guarda silencio ante la palabrería con que Herodes le halaga. Al no tener respuesta, le desprecia, se burla de Él, poniéndole una túnica blanca.
Oración: Jesús, Sabiduría del Padre, ahora guardas silencio. Por ti los sencillos y humildes han visto el poder de Dios y lo han celebrado con gozo grande. Ahora estás cabizbajo. Te agradecemos la lección que nos das, te compadecemos por el ultraje que recibes y te pedimos la gracia de hablar y callar oportunamente.
Se rezan 3 Padrenuestros.
Sexta Iglesia: De nuevo en casa de Pilato
Medita: Pilato reconoce que Jesús ni es alborotador ni ha cometido delito alguno de los que le acusan. Como que quiere dejarle libre; pero claudica ante las presiones de los adversarios que han jurado acabar con Jesús porque les resulta incómodo, su conducta y sus enseñanzas chocan con sus intereses. Total: Jesús es condenado a muerte de cruz, flagelado, coronado de espinas.
Oración: Jesús, te compadecemos por las injusticias cometidas en este proceso al que fuiste sometido y en el que nosotros metimos nuestras manos. Compadecemos en ti a cuantos por ser fieles a la verdad y a la causa de Dios en sus hijos son tratados injustamente. Te pedimos la gracia de la piedad divina ante nuestras injusticias.
Se rezan 3 Padrenuestros.
Séptima Iglesia: En el Santo Sepulcro
Medita: Jesús ha muerto en la cruz entre indecibles dolores, burlas, desprecios y abandonado de Dios. La Madre y los amigos que lo han acompañado en estos duros momentos, no han podido hacer nada. Unos amigos lo sepultan piadosamente. Se han cumplido las escrituras. Ahora a esperar el tercer día. Él, el poderoso en obras y palabras, ha dicho que resucitará.
Oración: Jesús, te acompañaremos en el silencio estos días, en la espera de que tu palabra germine en nuestros corazones y contigo resucitemos hombres y mujeres nuevos en tu Resurrección. Gracias, Padre Dios, tú siempre has escuchado a tu Hijo y así, vencedor de su muerte y de la nuestra, lo has resucitado.
Se rezan 3 Padrenuestros.
lunes, 6 de octubre de 2014
Expo Católica 2014... Una bendición
MÉXICO D.F., 30 Sep. 14 / 09:20 am (ACI/EWTN Noticias).- Por segunda ocasión se llevará a cabo la Expo Católica en el World Trade Center de la Ciudad de México, donde los asistentes podrán participar de conferencias, conciertos y una amplia oferta de artículos religiosos y todo lo relacionado con la fe.
SIAME señala que Expo Católica 2014 –que se realizará del 2 al 5 de octubre– estará dedicada a fomentar los valores de la familia y el respeto a la vida, por lo que bajo el lema “Familia, semilla de la fe”, buscará unirse al Sínodo de los Obispos sobre el tema de la familia que se realizará en el Vaticano del 5 al 19 de octubre.
“Es urgente velar por los valores humanos y cristianos al interior de la familia, ya que es la semilla vital de nuestra sociedad; por eso hemos querido estar en sintonía con los obispos en la búsqueda de un mejor acompañamiento para las familias que en estos momentos están siendo atacadas por el secularismo y la cultura de la muerte”, explicó Julio Hernández, director de Relaciones Públicas del evento.
Expo Católica estará organizada en tres áreas: en el área número uno albergará a los apostolados y movimiento laicales dedicados a la nueva evangelización, la promoción de los valores humanos y cristianos, y la defensa de la vida desde su concepción hasta su fin natural.
Además, se instalarán cerca de cien stands para la exhibición de libros, imágenes, películas, artículos religiosos, arte sacro, turismo y demás productos que ayuden a favorecer el encuentro con Dios.
El área número dos estará dedicada a las charlas y conferencias de distinguidos predicadores y sacerdotes que compartirán su misión y labor en favor de laIglesia Católica, así como temas relevantes en torno a la fe, vida y familia, entre ellos el reconocido científico dr. Ricardo Castañón y el actor Manuel Capetillo, así como cantantes católicos.
El área número tres está conformada por una capilla dedicada a la veneración de más de 200 reliquias de primer grado de santos y beatos de México y el mundo, cuyas vidas han marcado la historia de la Iglesia.
La Expo Católica es organizada por el movimiento Unión de Voluntades, junto con otros apostolados, quienes explicaron que está iniciativa busca despertar el fervor católico en una de las ciudades más grandes del mundo: “es un proyecto para dar a conocer las riquezas que tiene la Iglesia Católica en todos los ámbitos: espiritual, social y cultural, y nuestra ciudad necesita de propuestas sanas que inciten al bien común”, dijo Mario Aguilar, coordinador general del evento.
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